Huevos al gusto, omelettes, chilaquiles, enchiladas, molletes, hot cakes, sándwiches, y muchas más opciones de alimentos que puedes elegir entre una gran variedad de platos, pues los mexicanos no desayunan lo mismo los días laborales que los fines de semana. La base central de un desayuno son los huevos rancheros o los chilaquiles, dependiendo de la región, acompañados de un plato de frijoles con chile y un zumo de frutas.
Chilaquiles
Los chilaquiles son de los desayunos mexicanos más icónicos. Se preparan a base de trocitos de tortilla de maíz fritos (o tostados) o de totopos, y se bañan en salsa de chile verde o roja. Pueden llevar huevos, pechuga de pollo deshebrada, chorizo y hasta un buen trozo de cecina u otros tipos de carnes.
Lo que gusta a la gente es la mezcla de texturas y de sabores, lo crocante de los totopos y de las cebollas en aro que se sirven como guarnición se amalgama con la suavidad de la salsa, de la crema y de los huevos.
Tamales y atole
El atole es una bebida prehispánica, que consiste en la masa de maíz cocida en agua hasta lograr una textura espesa, a la que se le agregan especias, cacao, vainilla, canela y otros saborizantes como pulpa de frutas, chocolate, etc. Se endulza con piloncillo, un tipo de azúcar, y se prepara con leche. Sobre el tamal no hay mucho más que explicar.
El atole, una dulce forma de consumir el maíz, es conocido como atole blanco o de masa. Esta deliciosa bebida es una herencia prehispánica que goza de varias propiedades.
Elaborado con uno de los principales granos que cultivan y cosechan los pequeños y medianos productores mexicanos, el atole de maíz, constituye un alimento que, en época de frío, resulta benéfico para nuestro organismo por todas las propiedades de las que goza.
Las propiedades nutricionales aportadas por el maíz, son: rico en fibra, contiene antioxidantes, potasio, magnesio, fósforo y zinc, así como vitamina B1 y B7. Es una gran fuente de energía, que contiene 123 calorías por cada 100 gramos de maíz cocido.
En su forma original es una cocción dulce de maíz en agua de moderada viscosidad y que se sirve lo más caliente posible. Es frecuente que la bebida sea condimentada con especias aromáticas como cacao, vainilla, canela, anís, hojas de naranjo y otros saborizantes como el chocolate, jugo o pulpa de frutas dulces, para aumentar su sabor y tradicionalmente se endulza con azúcar o miel.
El 54% de la producción de maíz blanco se produce en cuatro estados: Sinaloa, Jalisco, México y Michoacán, en tanto que el 80% del maíz amarillo se genera en Chihuahua, Jalisco y Tamaulipas.
Molletes
Los molletes mexicanos se pueden preparar de mil maneras, pero de base, consisten en una receta muy simple: bollos de pan cortados a la mitad, horneados con una pasta de frijoles refritos y se les coloca una rebanada de queso para que se derrita. Se sirve con salsa pico de gallo y hay otras variaciones y presentaciones de acuerdo al estado (los hay dulces, con salchicha o chorizo, con carne, etc.)
Se pueden aderezar con muchos ingredientes como el pico de gallo, hongos, jamón, chorizo, chiles, carne asada y un largo etcétera. En la foto están cubiertos con trocitos de queso fresco y con tiras de lechuga. Independientemente de los acompañamientos, siempre se pueden servir los molletes con salsa roja o una salsa verde. De esta manera quedarán deliciosos, aunque los sirvas solamente con los frijoles y el queso, sin agregar nada más. Para servir los molletes:
- Con pico de gallo: Estos son los más comunes y también los más coloridos. Para preparar el pico de gallo, pica jitomates y cebollas en cubos muy pequeños, y también pica un poco de cilantro, muy finamente. Mezcla todo y adereza con sal, pimienta y limón. Baña los molletes con un poco de pico de gallo, después de sacarlos del horno.
- Con chorizo: Calcula unos 50 gramos de chorizo por cada mollete. Pícalo en trocitos y fríelo. Escurre la grasa y agrégalo a los molletes. Puede ser en una capa adicional, antes de hornearlos, o cuando hayan salido del horno. El chorizo puede ser de puerco o de pavo, o también chorizo verde.
- Con champiñones: Calcula tres piezas de champiñones por cada par de molletes. Puedes cocinarlos rápidamente en una sartén y cuando coloques las capas de frijoles y queso a los molletes, haz también una capa de champiñones. Listo, envía todo al horno.
Entomatadas
Las entomatadas caseras son típicas y tradicionales de México, y se preparan con tortilla frita doblada, bañada en una salsa de tomate y se pueden rellenar con queso, huevo revuelto, pollo, carne de res o frijoles refritos. Además, se sirven con crema, queso fresco, cebolla picada y cilantro.
Dependiendo de la región donde se cocinen, los ingredientes del relleno o la salsa pueden variar un poco, sin embargo, lo que distingue este platillo de otros es que la salsa con la que se baña no es picante, así que se vuelve ideal para quienes no son amantes del picante o no pueden comerlo.
Tortillas bañadas en salsa de tomate, preparadas con sal, ajo, cebolla, orégano y chile. Las tortillas van dobladas en dos, como si fueran un taco y pueden o no llevar rellenos de pollo, res, queso, frijoles, etc.
Enchiladas
Las enchiladas es un típico plato mexicano que se elabora con tortilla de maíz, bañada en una salsa, picante o no, utilizando un chile en su preparación. Dependiendo del estilo del platillo, según sus ingredientes, se pueden construir hasta 100 tipos de enchiladas.
Las tortillas de maíz son bañadas en alguna salsa, y pueden ir acompañadas o rellenas de carnes como el pollo, pavo, res o de queso. Se sirve con cebolla fresca picada o en rodajas, lechuga, crema de leche y queso, y las hay una por cada rincón de México. Pueden ser verdes, rojas, potosinas, mineras, de nata… Las hay de muchos colores y sabores, con el objetivo de deleitar nuestro paladar.
El platillo tiene su origen en las civilizaciones prehispánicas y su nombre viene de la palabra náhuatl chilli, que significa chile, y de tlapitzalli que significa flauta, es decir, flauta enchilada.
Las enchiladas rojas, son una mezcla de jitomate con algún chile seco como ancho o guajillo, y son famosas en el centro y norte del país y se pueden rellenar de pollo deshebrado, papa, queso o picadillo.
Las verdes se preparan con tomate, además de llevar cilantro o epazote en su preparación. También pueden ser rellenas de pollo o carne deshebrada.
Las enchiladas suizas son una variedad de las verdes, pero se diferencian porque su salsa es preparada con crema y son gratinadas con queso manchego.
Las enchiladas mineras son una variedad que se caracteriza por ser tortillas de maíz bañadas en una salsa con chile guajillo, fritas en manteca de cerdo, rellenas de queso ranchero desmoronado y cebolla picada, adornadas con lechuga, queso, rajas de chile en escabeche, zanahoria y papa en trozos.
Las hay potosinas, norteñas, placeras, michoacanas, de nata, del suelo y muchas más. Todas son hechas con ingredientes del campo, producidos y cuidados por manos de expertos que colocan los alimentos en cada mesa mexicana.
Tacos de carnitas
En México se conoce como carnitas al platillo hecho a base de cerdo que es cocido en su misma manteca. Para su preparación se utilizan grandes cazos de cobre o de acero inoxidable y una pala de madera para mover su contenido. Se puede pedir el taco de diferentes partes del cerdo, de nana, buche, maciza, tripa, cachete o chamorro. No hay un mercado mexicano que se respete que no cuente con un puesto de carnitas.
La mejor parte de la pieza es la espaldilla de cerdo, la cabeza de lomo, y la paleta u hombro. El solomillo es una de las piezas más magras y tiernas y si es ibérico aún más jugoso por el aporte extra de grasa infiltrada.
Ángel Villazón Trabanco es ingeniero, escritor y periodista cultural y te brinda la posibilidad de leer algunos de sus libros:
- Goces y sufrimientos en medievo
- Los tacos de huitlacoche
- Los enanos
- El sueño de un marino cántabro y el sueño de un orfebre andalusí
- Senderos de Libertad
También puedes leer otros artículos y relatos suyos en esta misma página web: www.angelvillazon.com
Ángel Villazón Trabanco
Ingeniero Industrial
Doctor en Dirección y Administración de Empresas