Además de que el barro mexicano ha estado presente en todas las culturas precolombinas, ha permanecido en nuestros tiempos y lo hemos utilizado como parte de nuestra identidad y dentro de nuestra vida diaria.
Los alfareros lo hacen en platos para el pozole, jarritos para el café, charolas para la sal de gusano o el mezcal, y nosotros lo ocupamos para decorar nuestro hogar. También hay floreros, tazas, cazuelas, figuras de adorno y todo lo que se nos pueda ocurrir para ocuparlo en nuestra vida cotidiana
Podemos adquirir barro mexicano en casi cualquier tienda de artesanías o mercado del país, y así poder escoger la pieza que más nos guste o nos sea funcional.
Los alfareros son artesanos del barro
El estado de Morelos es un productor amplio de este material en seco o en húmedo, el barro está siempre en contacto con las manos humanas.
En Tlayacapan se lleva a cabo la Feria del Barro la última semana de Noviembre. La arcilla y el barro son tierras, que contienen elementos naturales y una composición química que suele ser ideal para darle la plasticidad que se requiere para poder hacer figuras y obtener el resultado esperado.
Al momento de secarse puede mantener esa estructura firme que los alfareros creativos le dieron para convertirla en una verdadera de obra de arte popular conocida y usada casi en toda la región mexicana.
Pieza decorada de Barro
El Caolín es una arcilla pura, de color blanco utilizada principalmente en el trabajo de cerámica, en todos los estados de la República Mexicana existiendo artesanos que elaboran piezas.
Su técnica se va heredando a través de las generaciones para crear piezas sorprendentes con el barro para que nunca desaparezca la técnica y la tradición que va pasando de familia en familia.
La textura, humedad y el secado son las principales características de la técnica que se emplea para crear y que el barro debe tener para una buena elaboración de piezas. Está claro que los prehispánicos trabajaron la tierra y arcilla con las manos para elaborar piezas para la vida cotidiana como vasijas y jarros hasta llegar a las piezas que representaban a los dioses de las diferentes culturas.
Poco a poco se fue perfeccionando la técnica hasta que el horneado de las piezas apareció para darle la dureza que hoy caracteriza al barro, habiendo diferentes técnicas.
Piezas para comidas
Dependiendo del lugar, se trabaja el esmalte o la laca para dar un brillo a cada pieza de arcilla. Entre las culturas que perfeccionaron la manipulación del barro, destacan los zapotecas que hoy en día presentan dos tipos de barros: el negro y el quemado.
Exhibición de piezas de barro
El barro negro no es de ese color, sino que es la técnica propia de los oaxaqueños y de cómo logran este resultado. Cortes sesgados y simetría, son elementos característicos que constan de la utilización de un horno con dos bocas para crear una reacción parecida a la oxidación. Por otro lado el barro quemado es trabajado con arena y arcilla.
En Metepec, Estado de México, existe el famoso Árbol de la Vida, un trabajo de barro rojo que enmarca el ciclo de la vida con elementos decorativos que saturan la vista por lo fastuoso que representa este arte. Este barro se utiliza para hacer los famosos peregrinos de los nacimientos, un hermoso trabajo decorativo para las fiestas de diciembre.
Ángel Villazón Trabanco
Ingeniero Industrial
Doctor en Dirección y Administración de Empresas
Ángel Villazon Trabanco es Ingeniero, escritor y te brinda la posibilidad de leer algunos de sus libros:
- Goces y sufrimientos en el Medioevo
- Los tacos de huitlacoche
- Los enanos
- El sueño de un marino cántabro y el sueño de un orfebre andalusí
- Senderos de Libertad
Además te ofrece multitud de relatos y de artículos en su página web: www.angelvillazon.com